Al igual que las otras provincias gallegas, A Coruña es una provincia llega de historia y tradición, pero también es la tercera provincia más lluviosa de España. Su posición frente al Atlántico hace que la humedad sea elevada, lo que la convierte en el lugar perfecto para que las humedades se alojan en las viviendas.
Por eso es tan importante conocer que empresa de humedades en Coruña puede dar una solución definitiva a todos esos problemas que el exceso de humedad causa a las edificaciones. Sigue leyendo y descubre por qué es tan importante contactar a los expertos ante las primeras señales de humedades en tu hogar.
¿Por qué A Coruña es blanco fácil de las humedades?
Hay una combinación de factores en A Coruña que le hacen víctima de las humedades. En primer lugar, su clima, característico del atlántico, es de lluvias abundantes y mucho viento. La gran cantidad de poblaciones costeras con sus viviendas unifamiliares, desarrollan constantemente problemas de humedades.
La tan conocida Torre de Hércules, ubicada frente al atlántico, la cual ha sido considerada patrimonio de la humanidad desde hace 10 años, presenta serios problemas a causa de las filtraciones y el desprendimiento de los materiales con los que ha sido construida. Y así como un monumento tan importante sufre humedades, así también muchos inmuebles en A Coruña.
Aunque la humedad que se percibe en A Coruña varía levemente, durante la época lluviosa, la humedad relativa se eleva hasta superar el 80%. El período más húmedo del año dura 3 meses, desde junio a septiembre, y es justo durante este tiempo que el clima se siente más bochornoso, alcanzando en agosto sus picos más altos.
¿Qué es la humedad ambiental?
La humedad ambiental es la cantidad de vapor de agua en el aire. Esta cantidad puede expresarse en forma relativa o absoluta. La humedad absoluta se mide en gramos, por su parte, la humedad relativa se expresa en porcentaje. Este último es el término más usado a la hora de indicar el nivel de humedad en algún lugar determinado.
El aire que nos rodea cuenta con una capacidad máxima de contener vapor de agua y este valor varía en función de la temperatura y la presión. En el caso de un ambiente completamente seco el valor de la humedad relativa será de 0%. Para un ambiente totalmente saturado de vapor de agua, la humedad relativa será del 100%.
El nivel de humedad depende de algunos factores propios de cada lugar, como, por ejemplo, la frecuencia de las lluvias, la temperatura, la cercanía de mares o lagos y la vegetación del terreno. Cuando la temperatura disminuye, la humedad relativa tiende a aumentar, lo mismo sucede cuando la cantidad de precipitaciones aumenta.
El problema es el punto de Rocío
El fenómeno denominado como punto de rocío se trata de un punto de temperatura en el cual la humedad relativa del ambiente es del 100%, de modo que el aire no es capaz de soportar más vapor de agua y aparece el mencionado rocío adherido en las superficies, a través de la condensación.
Este fenómeno suele presentarte con cambios de temperaturas. Podemos observarlo en la naturaleza en las madrugadas cuando desciende la temperatura y el rocío aparece sobre las plantas y objetos. También podremos notarlo al sacar una botella fría del refrigerador.
El problema de estar expuesto a un ambiente tan húmedo de manera constante es que se comienzan a desarrollar enfermedades respiratorias o a agravarse las preexistentes. Esto se debe a la presencia y proliferación de ácaros, hongos y moho dentro de la vivienda. Estos microorganismos necesitan para desarrollarse un ambiente húmedo y estar en él por tan solo 24 horas.
Pero, además de eso, las lluvias, sumadas a los problemas estructurales y de impermeabilización en las fachadas, tejados y terrazas, generan un sinfín de daños en las estructuras. Sin hablar del salitre, el suelo húmedo y los fuertes vientos. Por estos factores A Coruña tiene diversos problemas de humedades.
¿Qué tipos de humedades hay en A Coruña?
Veamos a continuación los diferentes tipos de humedades que pueden encontrarse en una vivienda de Coruña:
Humedades por Condensación
Las humedades por condensación suelen ser producidas por acciones cotidianas capaces de aumentar la humedad relativa en el interior de la casa, como, por ejemplo, cocinar, usar secadoras, secar la ropa en el interior, bañarse con agua caliente, entre otras.
Además, la humedad por condensación también puede ser causada por defectos propios de la construcción, como aislamientos térmicos insuficientes en los cerramientos de puertas y ventanas, sistema de calefacción colocado en lugares inadecuados o un bajo nivel de ventilación.
La humedad generada por estas acciones se acumula en el aire y al entrar en contacto con superficies frías se produce la condensación. El rocío generado se puede acumular en el techo, paredes, suelos y muebles. Este rocío es capaz afectar las estructuras de la vivienda y generar malos olores, moho y hongos.
Una vivienda con problemas de humedades por condensación será más difícil de calentar en invierno, además, su calidad del aire se verá comprometida por lo cual sus habitantes pueden sufrir de alergias, enfermedades respiratorias, como el asma o la sinusitis, y cefaleas u otros dolores de cabeza.
Humedades por capilaridad
Este tipo de humedades es muy habitual en las plantas bajas de los edificios. El agua del suelo logra abrirse paso a través de los cimientos y las paredes que se encuentran en contacto directo con el suelo y que no cuentan con una barrera física contra las humedades.
La humedad por capilaridad produce daños estéticos en las paredes, provoca los comunes desprendimientos de revestimiento y acelera la descomposición de elementos de madera. Los materiales como el ladrillo o la piedra son especialmente porosos, lo cual los hace ideales para atraer las humedades.
El agua del subsuelo posee sales y minerales que quedarán depositados sobre las paredes afectadas por este tipo de humedad, lo cual genera un estado de humedad permanente sobre la pared. Esto hará mucho más difícil calentar su hogar, por lo que necesitará aumentar su gasto de energía eléctrica durante el invierno.
Al ser un problema bastante complejo, este tipo de humedad debe ser tratado por profesionales lo antes posible.
Humedades por filtración
Este tipo de humedades es sumamente peligroso y suele aparecer en zonas con deficiente impermeabilización o fisuras, así como en sótanos, bodegas y garajes situados debajo del nivel del suelo. Una filtración permite que el agua logre ingresar a través de la estructura, fachadas y muros de la vivienda.
Si no se logra detectar a tiempo, las filtraciones pueden producir daños graves y poner en peligro la resistencia estructural de la vivienda o edificio. También pueden generar desprendimientos del revestimiento de muros, paredes y techos, daños en marcos de madera, ventanas, muebles, además de fallos en las instalaciones eléctricas.
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